Desde la fecha de creación de la Administración General de Ferrocarriles hasta comienzos de la década de 1930, la red estatal de ferrocarriles había triplicado su extensión, constituyendo progresivamente una red de trocha angosta formada por una multiplicidad de líneas y ramales que, en la práctica, perseguían un objetivo de fomento más que comercial.
En este marco, la administración estatal decide ensayar con un tipo de vehículo hasta entonces ocasionalmente utilizado en nuestro país: el coche motor. Para ello, en 1935, contrata con firma húngara Ganz, de Budapest, la provisión de 34 coches motor diesel simples para sus líneas de trocha métrica (29 coches), trocha media (2 coches) y trocha ancha (3 coches).
Los promisorios resultados obtenidos llevan a la administración estatal a contratar una segunda compra de este tipo de vehículos entre los que se contaban nuevos coches de mayores dimensiones y comodidades, tanto para la trocha ancha (cuya historia tratamos en esta otra nota) como así también para la trocha métrica. En esta última se incorporaron dos tipos distintos denominados Triple Catamarca (TC) y Triple Local (TL), construidos en 1938 y puestos a rodar en abril del año siguiente.
Ambos tipos compartían las mismas características constructivas, mecánicas y estructurales basadas en el motor Ganz Jendrassik VIII JaR, de ocho cilindros en línea de 170 mm de diámetro por 240 mm de carrera que le conferían una potencia neta de 300 hp. La transmisión era del tipo mecánica, contando para ello con una robusta caja de velocidadesmontada en el boguie motriz. Amén de estas características comunes, veamos a continuación cómo se conformaba cada uno de los tipos mencionados.
Tipo TC («Triple Catamarca»)
Se trataba de dos trenes formados por tres coches cada uno: dos motrices en los extremos más un coche intermedio. Uno de los motrices poseía 48 asientos más un furgón de equipajes, compartimento postal y un amplio buffet. El coche intermedio, por su parte, contaba con cuarenta asientos a los que se sumaban cinco compartimentos con seis asientos cada uno, en tanto que el motriz restante contaba con cuatro compartimentos de seis asientos cada uno y un amplísimo furgón de encomiendas que ocupaba casi la mitad del coche.
Si bien se adquirieron con el propósito de operar entre Córdoba y Catamarca (de allí su denominación), la administración de los Ferrocarriles del Estado los afectó inicialmente a un servicio rápido entre Retiro y Rosario que estableció una seria competencia al Ferrocarril Central Argentino y obligó a incorporar dos trenes más del mismo modelo para cumplir el diagrama original.
Luego de la nacionalización, y ante a la duplicidad de servicios del Mitre y Belgrano los dos trenes que corrían a Rosario fueron trasladados a Santa Fe para correr entre ésta y Córdoba. Finalmente, a mediados de la década de 1960 en los cuatro son transferidos a la zona Buenos Aires para efectuar servicios a Carhué por vías de ex Midland de Buenos Aires y Patricios (por vías de la ex CGBA) hasta el año 1977 cuando dichos servicios son suprimidos.
Llegaron al país numerados como CM 121/131 al 124/134, siendo renumerados CMU 2772/2775 al 2776/2779 en la década del ’60. Terminaron sus días concentrados en la playa de Talleres San Cristóbal algunos, y otros en las playas de Gobernados Vera y Charadai en las Provincias de Santa Fe y Chaco.
Tipo TL («Triple local»)
Eran cinco formaciones de tres coches cada una, pero con una particularidad respecto al tipo TC: los motrices de ambos extremos eran idénticos entre sí y poseían, además, doble comando para permitir su uso como coches simples. Contaban con 68 asientos más un furgón de encomiendas y un modesto baño. Por su parte el coche intermedio contaba con 112 asientos sin otro servicio.
Fueron puestos en servicio en 1939 con las siglas CM 370 al 379 sirviendo en la zona local entre Retiro y Grand Bourg junto con los Ganz simples incorporados en la misma época. Con los años se les suprimió el segundo puesto de comando, sumando con ello otras dos comodidades. Finalmente terminaron sus días en la zona Buenos Aires corriendo trenes locales e interurbanos hasta fines de la década de 1970 renumerados ya CMU 2780 al 2789.
En cuanto a sus colores, tanto los tipo TC como los TL llegaron al país pintados íntegramente en color aluminio con una franja azul al medio de la altura lateral, que en el caso del tipo TL remataba en el frente en una “V”, cosa que no sucedía en el tipo TC. En la década de 1960 son repintados con los colores normalizado para coches motor del Belgrano, es decir en bermellón y crema (separados por una franja azul) y plateado el techo, decoración que conservaron hasta el fin de sus días. (Un especial agradecimiento al Sr. Miguel A. Pignataro por su desinteresada colaboración).